lunes, 29 de mayo de 2017

Crónica de la SR Camino del Cid. 615 Km y 10.200 metros de desnivel. 27-05-2017



La Super Randonnee Camino del Cid es un evento permanente (uno puede elegir la fecha en la que va a realizar la ruta) organizado por la Peña Ciclista de Massamagrell (Valencia), cuyo recorrido, por las provincias de Valencia, Castellón, Teruel y Cuenca, es el siguiente (pongo los lugares donde hay que hacer una foto a modo de control) :

Massamagrell, Serra, Eslida, Onda, Rubielos de Mora, Cantavieja, Teruel, Toril, Mas del Olmo, Higueruelas, Altura, Gatova, Massamagrell. 




La prueba, tiene 615 Km  y 10.200 metros de desnivel. El tiempo máximo para completarla son 60 Horas.

Preámbulo. Un día grande.

Cuando me dispongo a afrontar una de estas pruebas, que para mí son lo mejor de lo mejor, siempre me viene a la mente la expresión del titulo.

Cada una de ellas (esta es la cuarta que hago) tiene sus particularidaes, algo que las hace diferentes.
El disintitivo de esta es la inexistencia de grandes puertos, lo que implica que el asunto es un sube y baja continuo sin exigentes ascensiones que te dejen KO pero sin largos tramos llanos o de bajada donde poder recuperar. 

Por lo demás un recorrido muy interesante donde, para mi gusto, lo mejor es el periplo turolense y el tramo desde Ademuz (Km 435) hasta Higueruelas (Km 509).

Al final pude completarla del tirón, entiéndase sin parar a dormir, que es el objetvo que siempre me planteo en estas pruebas, en un tiempo total de 31 Horas y 50 Minutos (28 horas y media sobre la bicicleta). 


Capítulo 1. La ruleta de la fortuna.
  
Desde mi entrada en la provincia de Teruel (Km 170) y hasta Cantavieja (Km 248) la presión del Sol me tuvo contra las cuerdas, ¿qué tontería es esa de Sol y buen tiempo?.

Sabedor de que ganar este asalto era cuestión de tiempo tiré de paciencia y oficio imponiéndome un ritmo lento para no dilapidar todas mis fuerzas ya por la tarde.

Pero bueno, en este tipo de pruebas siempre hay algún tipo de handicap, las condiciones ideales, durante 600 Km no existen, y, al menos, evité al coco del sorteo, el temible cierzo. 

Así que no me quejé.


Los prmeros kilómetros, por la provincia, de Valencia trasncurren por buenas y entretenidas carreteras.

También me topé con muchos ciclistas lo que siempre se agradece.

 Entre Matet y Villamalur (Km 98), paz y tranquilidad.


Cerca de Montanejos (Km 156, Castellón).


Y entro en la provincia de Teruel. ¿Quién ha puesto la calefacción?


Rubielos de Mora (Km 183)


Puerto de Linares (Km 215). Corto pero con tanto calor se me hizo eterno.


Entre Mosqueruela (Km 223) y Cantavieja se rueda por una pista asfaltada muy entretenida.



Dadas las circunstancias recibí el anochecer con gran alegría (y satisfacción).


Capítulo 2. Problemas.

Me voy conociendo, ya tengo en mi haber cierta experiencia, y tras pasar Toril (Km 385), sobre las dos de la mañana, a tenor de las sensaciones supe que me tocaría lidiar contra el sueño.

Fui tirando hasta que tuve que poner en práctica mi remedio número uno: parar y, sin bajarme de la bicicleta, cerrar los ojos unos diez segundos. A veces esto, tras repetirlo varias veces en unos pocos kilómetros, me da resultado.
Pero no hubo suerte y cuando vi que la cuneta se ensanchaba lo suficiente apliqué la segunda solución: sentarme, bajar la cabeza y cerrar los ojos durante uno o dos minutos.
 
Comprendí que había funcionado cuando, tras reincorporarme, el huracán de pensamientos que me había acompañado para tratar de aullentar la somnolencia había desaparecido.

Estaba en calma, tranquilo y despejado así que crisis superada y a seguir rodando.

A partir de aquí comenzó el suplicio.


 Va amaneciendo (Mas del Olmo (447) y asunto zanjado.


Capítulo 3. De sorpresa en sorpresa.

La parte final se me hizo agotadora porque después de un repecho vino otro y así sucesivamente, sin tregua, y cuando me dije que lo peor ya había pasado, que ya había tenido que pasar, que tenía que tocar ya rodar por un terreno favorable, fueron apareciendo más y más subidas, ¡un ejército interminable de subidas!

¿Pero aquí cuándo se baja todo lo que he subido?, ¿qué tomadura de pelo es esta? llegué a farfullar en algún punto del último tramo.
 Primeras emboscadas tras la salida del Sol.



Y más a media mañana.




Hasta el carril bici de Massamagrell tiene alguna subida...


Línea de meta.




Toda la información de la prueba

http://www.pcmassamagrell.org/camino.html

domingo, 21 de mayo de 2017

Villanueva, Bujaraloz, Sastago, Belchite, Epila, Tudela, Ejea, Villanueva


Las fotografías las realicé ayer en el itinerario descrito en el título. Fueron 427 Km y unos 2.000 metros de desnivel.

Érase una vez en el oeste hubiese sido el título indicado de esta entrada.

La ruta, que transcurrió sobre el desierto, fue una sucesión de rectas dentro un escenario cuya monotonía resultó, en algunos momentos, sofocante.

Al final esta excentricidad no sólo me gustó mucho sino que, además, renovó mis ilusiones por afrontar los próximos retos, cargados de puertos y montañas (¡cómo las eché de menos!).

A partir de ahora, y hasta que los puertos me dejen KO, no quiero ver una recta ni en pintura.





Los Monegros, al poco de comenzar la ruta.


Entre Bujaraloz y Alborge continuamos en el desierto, sólo el Ebro y algún árbol parecen desafiarlo.


De Quinto a Belchite atravesamos la estepa zaragozana.



En un paisaje tan monótono tuve la sensación de no haber avanzado nada.


Otra vez vuelvo a toparme con el Ebro. Esta vez cerca de Gallur.

El desierto de las Bárdenas.



La implacable mano del hombre también se atreve con el desierto.

El Castillo de Sora.

Como no podía ser de otra manera el final también transcurrió entre rectas.

Enlace al Bikemaps

https://www.bikemap.net/es/route/4004138-desierto/

domingo, 14 de mayo de 2017

Villanueva, Tauste, Borja, Tabuenca, Beratón, Ágreda, Vozmediano, Borja, Villanueva


Las fotografías las realicé ayer en el itinerario descrito en el título. Fueron 313 Km y unos 2.500 metros de desnivel.


Bueno, pues ya va quedando poco para la Brevet de 1.000 Km de Murcia que será, Dios mediante, uno de los grandes retos del año.

A tres semanas de este reto uno no sabe muy bien que hacer, si ser prudente y guardar fuerzas o hacer alguna ruta larga antes de gastarlas todas en el citado evento.

Este sábado me decanté por lo primero pero ya veremos si en los próximos fines de semana podré contenerme, ya veremos a ver que pasa.

Los primeros cien kilómetros son bastante suaves y van cayendo rápido.



Fotos del alto de la Chavola, tanto de la subida como de la bajada.




Puerto de Beratón.



Pasado Ágreda se rueda por las faldas del Moncayo.


El tramo final también es muy suave.

Enlace al Bikemaps

https://www.bikemap.net/es/route/3993008-villanueva-moncayo/

miércoles, 3 de mayo de 2017

Vuelta al Prepirineo Aragonés



Las fotografías las realicé entre el sábado y el domingo en el itinerario que luego detallaré. Fueron 600 Km y unos 6.200  metros de desnivel.


La ruta, que pese a las adversidades meteorológicas pude completarla sin parar a dormir en un tiempo total de 28 horas y 35 minutos (26 horas y 11 minutos sobre la bicicleta), tuvo el siguiente recorrido:

Larués- Nocito- Pto Serrablo- La Fueva- Campo- Benabarre-El Grado- Barbastro- Berbegal- Grañén- Alcubierre- Villanueva de Gállego- Castejón de Valdejasa- Sierra Luna- Uncastillo- Undués de Lerda- Larués.

Anduve toda la semana mirando los pronósticos del tiempo y, ante sus vaivenes, diseñé tantas rutas como días hay de lunes a viernes (cinco para los que seáis de letras).

Sobre la bocina me decanté por este quinto plan con cierto pesimismo porque, me dije, como salga tan bien como el célebre “Plan E” de los efervescentes brotes verdes zapateriles al kilómetro siete se me rompe la bicicleta.


Al final quedó una jornada dura por el viento y la amenaza constante de lluvia durante la noche pero misión cumplida y ahora a pensar dónde meter en la agenda los cuatro proyectos que se quedaron pendientes.



La primera fotografía, de Bailo.

 El centenario Embalse de La Peña.


Alto de Nocito, en el parque natural de la Sierra y Cañones de Guara.

 El Tozal de Guara, el Rey del Prepirineo aragonés.


 Peña Montañesa desde el Puerto del Serrablo.


 Bonitas vistas camino de Ligüerre de Cinca.



 En jornadas así es imposible acertar con la indumentaria. Por la mañana mucho frío, por la tarde algo de calor, por la noche fresco y todo ello mezclado con viento y riesgo de lluvia. Opté con salir con el maillot de invierno y en el pequeño alto de Ligüerre de Cinca (Km 150) sudé la gota gorda.



 La ascensión más anodina fue el Alto de Foradada.


 Más subidas pasado Campo.


 El Turbón.


 El Puerto de Laguarrés (unos 8 Km al 6%) se sube en la SR Pirineos así que este puerto acabará siendo de los más conocidos del Prepirineo aragonés.


 Vistas sobre el Somontano de Barbastro cerca de El Grado.


 El Puerto de Alcubierre fue el último de la provincia de Huesca.


 Pasado Villanueva, unos tres kilómetros, donde vivo, comenzó a llover. Pero, por la noche, algo tan simple como ponerse un chubasquero puede ser bastante tedioso (tienes que parar en mitad de la carretera, quitarte los guantes, con los míos puestos es imposible hacer nada a derechas, y el chaleco reflectante, la mochila, sacar el chubasquero, asegurarte de que en ese paso no se te ha caído la cartera, por ejemplo, quitarte el maillot largo, otra prenda más encima y me cuezo, ponerlo en la mochila, etc etc NOTA: Si da pereza leerlo imagínense hacerlo...) por lo que preferí dar media vuelta e ir al piso, donde aproveché para echar un café y mirar el teletexto para ver qué había hecho el Real Zaragoza (perder, como casi siempre este año).
Esto me vino muy bien porque con este pequeño añadido pude llegar a los 600 Km sin necesidad de estirar la ruta en el tramo final.  
En media hora vuelta a la carretera donde, por cierto, ya no llovía.



Pasado Luna volvemos a rodar por el Prepirineo.


 Amanece cerca de Luesia.


 Alto de Baztanés, entre Uncastillo y Sos


 Puerto de Cuatro Caminos desde Undués de Lerda.


 Puerto de Bagüés el último de la jornada.


 San Juan.


 Línea de meta.


 Enlace al Bikemaps


Y ahora a planear el próximo golpe que, si el tiempo lo permite, será a finales de mayo.