Las fotografías las realicé ayer en el itinerario descrito en el título (ver mapa al final). Fueron 36 kilómetros con el único objeto de visitar el pueblo abandonado de Fablo.
Hoy en Barcelona el mandamas jugará a papás y a mamás.
Y algo de caja también hará porque, o es muy cobarde o no se le antoja otra cosa.
Para que luego digan que el teatro no da frutos.
Y hablando de comedias, genial el numerito de Sor Botella, lástima que fuese ante un público de los llamados difíciles.
Ni yo, en mis mejores años del instituto (y ojo que saqué un 3,5 en el examen de inglés de la selectividad), hubiese parido esa maravillosa “relaxing cup of café con leche”.
En fin, que están sembrados aquí y allá, pero, por aquí en medio, la cosa sigue igual.
Pese a la imagen el pueblo de Guillué no está abandonado.
En este lugar se acaba el asfalto y comienza una pista decorada con curiosas figuras de piedra.
El cruce que hay que coger para acceder a Fablo (una vez coronado el puerto homónimo) está señalizado. Unas fotos de este pueblo en estado ruinoso.
A mano derecha puede verse la torre de la iglesia
Más fotos de esta construcción y alrededores
Vistas desde el puerto de Fablo ( 1.235 metros de altitud)
El pueblo de Espín
Vistas sobre el Tozal de Guara desde Guillué
Mapa de la ruta:
He disfrutado mucho siguiéndote por esos montes y la pena que me da ver esos pueblos es tanta como emoción al recorrerlos.
ResponderEliminarEn mis tiempos se estudiaba francés, el inglés llegó después. En fin, hay muchas ocasiones en que esta gente, que se las da de sabios, estarían mejor con la boca cerrada y seguiríamos pensando que lo son.- Besicos.
Gracias por el comentario.
ResponderEliminarEl problema es que no sólo no son sabios sino que además no son honrados.
Un saludo.