Las fotografías las realicé el fin de semana el itinerario descrito en el título. Fueron 530 Km y 4.000 metros de desnivel.
Salí el viernes a las 18:40 y llegué el sábado a las 18:15 (tiempo total 23 Horas y 35 minutos, y unas 22 horas y 15 minutos sobre la bicicleta).
Tenía ganas, más aún, la necesidad, de afrontar la primera noche sobre la bicicleta.
Debía romper la comodidad en la que me había establecido al compás de los toques de queda.
Salir de día, llegar de día, y así todas las rutas, una detrás de otra, durante veintisiete fines de semana, ¡veintisiete!
Y más viniendo del lamentable año anterior, donde el confinamiento fue devastador y arrasó el verano, que es la época de los sueños y los retos.
Las tendencias y las dinámicas acomodaticias son peligrosas, más en un deporte como el ciclismo, así que ya iba siendo hora de afrontar algo estimulante, por muy bien que se esté rodando unicamente bajo la luz del Sol.
Como me sentía algo oxidado, y en un alarde de prudencia, me decidí a comenzar la jornada ciclista después de trabajar porque, de esta manera, el tramo nocturno empieza con pocos kilómetros recorridos y las fuerzas intactas.
Bueno, después de trabajar y de una hora de siesta y una merienda-cena digna de mención….
La ruta en sí resultó interesante y el tramo nocturno, salvo el descenso del puerto de Cabigordo (en Teruel y a 1.600 metros de altura), resultó muy llevadero.
Buenas Samuel, como siempre un placer leerte, y felicidades por la ruta. Me alegro de que ese "animal" que llevas dentro, vuelva a campar a sus anchas en su habitat natural. Un saludo.
ResponderEliminarMuy buenas y gracias por el comentario. Sí, la verdad que ya echaba de menos poder moverme libremente. Ahora toca aprovechar y volver a recuperar planes e ilusiones. Un saludo!
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